Los domingos en el barrio
Escucho algún auto crispar la tierra
Escucho
Los niños que gritan, bardean
Escucho
la maquina que corta pasto
Escucho
la cumbia en el aire
que puso un vecino, seguro
está en familia, tomando cerveza
o cocinando o prendiendo fuego
Bailando en chancletas
con su pareja o su prima
sobre el concreto del suelo
Y llegan amigos, invitados
Aterrizan en sus motos esqueléticas
Traen pan, traen hielo
Y una tanda de ropa que
ya no les queda a sus hijos
El menor se prueba una remera de Ronaldo
y sonríe aunque quería la de Messi
Sale corriendo con su pelota descuerada
sus amigos ya desfilaban
las calles
en sus playeras que son
talles
diez veces más grandes
que ellos, pedalean al almacén
La melli baldea la vereda
y canta una cumbia porque sabe
que tiene voz, los
clientes llegan con sonrisas
Se preparan para ver el partido
o festejan el que ya se jugó
Los pájaros se acercan a las calles no
hay autos casi que los maten
Los perros duermen al sol
Dos niños descubren el amor detrás
de un paredón antes que
los encuentren y corran
y corran a picar
Se levanta la mesa

Se sirve más cerveza
Se va a comprar sino
Se juega un truco se
mira el celular
Se cambia el pañal
Se pone la pava
Se consuela a quien llora
Se cura la herida
Se lava con agua fría
Se pellizca un brazo y
Se pasa el dolor o
Se hacen cosquillas y
Corren y ríen los niños heridos
Se van los tíos que
No trajeron regalos
Se van los primos que
Enseñaron a putear
Se hace tarde se
Duerme siesta o
Se toma mate
Se visita a un amigo se
Pasea
Y se vuelve a bailar
Se hace tarde ya
Y las voces empiezan a callar
o a hablar para adentro, susurros
que se quedan en las cuatro paredes
Y es que se filtra la noche
en el interior de las casas
Se prenden las primeras salamandras
y en el cielo se dibujan sus humos
Las madres ya comenzaron a cocinar
Ya saben
Lo niños siguen derrapando
las calles vacías no quieren dejar
de jugar porque ya saben
También ya sabe la almacenera
Que mira el reloj impaciente
Hoy
cierra temprano.

Me siento en un banco en una plaza
que no me dice nada
hago esto para sacudirme.
O me paro frente a una casa o un árbol
que significó algo en mi infancia.
Acaricio las plantas que tienen ramas duras
para marcarme la piel y llenarme de olor.
O me paro en medio de la ruta
para sentir valor
o miedo.

Un apagón largo
entre acción y acción
una pausa oscura
espero el tiempo como si
no pasara.

Veo tu piel delicada
tu sonrisa fresca y anuncio
un mensaje sin señal
sin poesía
¿qué me pasa?

¿dónde están las palabras

que alguna vez te enamoraron?
siempre pienso en términos de creencias:
“creo que no me vas a escribir”
y no “quiero que me escribas”
¿será que no acepto que te quiero?
quisiera contarte que
dejé de escribir
de pintar.
que pienso mucho
que no lloro hace meses
que me parece que me pasan cosas
que arranqué terapia
que no estoy seguro de estar bien
pero creo que lo estoy intentando
que todo me empezó a aburrir
que estoy ¿aburguesado?
que no corro riesgos

que no me meto al lago hace años
que no dormí en las sierras
que no viajé en verano
que estoy en un deja vú constante
que no actúo porque sí
que perdí el disfrute
que últimamente pienso que el arte
no existe
que la amistad no existe
que tampoco existe el amor
que todo, absolutamente todo
podría no existir y sin embargo
existe
que mi hermana creció y no juego con ella
que me aburren las charlas filosóficas
que antes me apasionaban
que escribo sin seguridad
¿por qué me cuesta tanto reír?
mi hermano dice si me voy a mi “casa”
cuando subo a comer a mi pieza
hace rato que no veo series “serias”
pongo unas de humor básico, yankees
y dejo que el tiempo pase
Algunos días duermo siesta.
No recuerdo los días sin dormir
viviendo intenso.
Estoy despolitizado
Desesperanzado
Recuerdo de chiquito, y no es nada particular
Jugaba con que si un genio se aparecía
Si tuviese 3 deseos o solo uno
Desearía mil deseos más
Y solo ahora me doy cuenta
Que eso era lo importante
No si se cumplían
Desear
… desear fuerte, como antes
Quiero verte, acariciarte
Quiero querer
Quiero querer mucho
Y si aún me queda un deseo
Deseo desear más

Anular la cabeza.
Cierro los ojos y escribo.
Más rápido.
No corrijo ¡JÁ!
Puedo acalambrarme las manos escribiendo sin sentido.
Busco sentidos.
Crecen las palabras y se alaaaargan,
se hacen gaaarbtos
difíciles deeler.
Y es que me estoy convocando.
Canalizo la ansiedad y espero.
En la hoja un croqui.
Toco el botón del celular, lo prendo.
Veo el mensaje que no mandaste
y no lloro. Sí.
Lloro una no lágrima.
Espero y el tiempo me anestesia,
aprieto el botón y no veo nada. Lloro el no llanto. 
Escribo sin palabras un poema muerto,
aprieto, nada. Aprieto y nada.
Nada. Na.da.
Deah…
¿para qué escribis?
Para que me contestes esta historia
La poesía es una historia viva que desea.
La vida es poesía que desea historias.

Se desea más allá.
La magia siempre es cambio
¿será por eso que nos cuesta tanto desear?
Deseo que las palabras no nos impidan volar
deseo entonces con mi ser entero
deseo y me proyecto
me expando como el sol
y con cada rayo de luz te abrazo.
Ser luz será entonces parte de mi deseo.
Tomar mates viendo el agua fluir
sin tiempo. No tiempo. Perder el tiempo.
Aprender a hacer nada sin aburrirnos
Deseo es escribir un poema sin leerlo
paso de páginas sin pensar
anulo el razonamiento.
Deseo romper el dique que cree
y que me arrasen los sentimientos,
salir desde esta aparente nada
y emborracharme sin alcohol y
escribir en las madrugadas sin
dioses que me obliguen.
Continuar tus trazos acariciando tu mano.
Confío en el deseo
que si no me desea seguiré de largo.
No podrán quitarme nunca el
hambre que tengo de
desear infinitamente
hasta que me envuelva, vuelva
la bruja de la soñada noche y
caiga en mi piel
pronunciando versos imposibles

No es tristeza, es ansiedad
me digo mientras trato de respirar
cuánto más hondo me entra el aire
más cosquillas me hace
pero no basta. 
Hace un rato se me cayó la moto
en cámara lenta
porque la vereda estaba rota
o yo no tenía equilibrio
logré desahogarla con el consejo que me dio el flaco
acelerar a fondo
¿así se desahoga el alma también?

respiro a fondo
varias veces
pero no basta, ya lo dije. Me repito.
Tengo que hacer algo con la cantidad de medias sin pareja
que hay en mi coso que tiene ropa
la calathea hace meses que tiene el borde de las hojas secas
y yo le doy cascaras de huevo, de banana
borra de café
le humedezco las hojas
como las de este poema
mentira. Si no sé llorar